Otra vez el intendente de La Falda relacionado con un hurto

Por Jorge Dominguez

Esta vez, lo ocurrido este sábado 10 de Junio por la noche, lo tuvo como víctima, y muy rápidamente a través de sus voceros oficiales, toda la prensa recibió vía whatsapp, los detalles de la reja rota de una ventana, así como la sustracción de dos billeteras con poca plata y todas las tarjetas de crédito. Los agradecimientos de rigor no tardaron en llegar, a la policía, al banco provincia de Córdoba y al Santander. Todos accionaron con rápidos reflejos y dentro de los protocolos establecidos y esperados por alguien que ha sufrido una violación a su intimidad y patrimonio privado.

El desafío de afrontar la verdad

A esta altura de las circunstancias, quienes desde hace muchos años cumplimos el rol de comunicadores, luego de un tiempo podemos analizar y sacar conclusiones sobre algunos gobernantes, tanto por su capacidad de accionar en su función específica, como en el modo que reaccionan y afrontan desde su propia dialéctica, tanto sus éxitos de gestión, como las adversidades, fracasos o cuestionamientos que la política pública le reserva a los funcionarios de esta década.

En esta mirada lógica, el actual intendente de La Falda, acrecienta el mito de convertirse en un enigma. Si habláramos de un felino, podríamos aceptar que sin ser inmortal, tiene una serie de mitologicas razones para burlar siete veces la muerte. Pero en el caso de una persona de carne y hueso, y con la responsabilidad de administrar los recursos en común de 20.000 habitantes, el margen de supervivencia política intacta en Arduh, y no solo por defender algunos de sus funcionarios, ya no es aceptable atribuirlo sólo a su propia capacidad, o a un don, sólo tiene como explicación alguna intrincada, misteriosa y masónica coincidencia.

La técnica del Mago Contemporáneo

Este artículo no tiene la menor intención de subestimar a ninguna persona, ni al lector, ni a ningún funcionario nombrado específicamente. Solo intenta reflexionar sobre situaciones totalmente veridicas y sin explicación, de las cuales somos muchos los testigos, pero que como en un juego infantil, una energía sobrenatural congela y oculta situaciones casi inverosímiles para una comunidad que se jacta de respetar los principios PRO-republicanos.

Sobrarían los ejemplos de anuncios, irregularidades y graves denuncias, pero que solo tienen explicación, análisis profundos y dictámenes en las mesas de los diferentes cafés de La Falda. Parecieran desaparecer casi como por arte de magia, las leyes, la libertad de prensa, las instituciones, la honestidad y toda verdad que hace medianamente racional a nuestra democracia.
Por eso en realidad esta publicación solo pretende resaltar la pérdida de los valores que en algún momento quienes por la patria y los santos evangelios, dijeran jurar y defender, y remarcar que su recuperación se definirá sólo por acciones y no por omisiones.

La verdad tarde o temprano es aceptada por nuestras propias realidades, y solo en los shows televisivos de los grandes magos la ficción se convierte en real. El futuro y prosperidad de las comunidades no se puede definir por un buen slogan, o por una afable sonrisa. Requiere que cada habitante, desde el rol que tenga, participe activamente en todo lo que se comparte en sociedad, y no solo en un acto eleccionario.
En síntesis, en La Falda han desaparecido los códigos, y no los que están magnéticamente sobre un plástico. Aceptemos eso y veremos que vivimos en una grieta tan grande como invisible, y que solo la verdad podrá iluminar nuestro mejor camino con la claridad para recorrerlo.