17 de mayo de 2016 Fuente: José Hernandez - La Voz del Interior
Mató a su padre para quedarse con la casa y venderla: perpetua
Hirió además a su madre y ella sobrevivió. El drama ocurrió en La Falda. El homicida tiene 58 años y su defensor alegó hasta último momento “emoción violenta”. Los jueces la desestimaron.
Por José Hernández
Cruz del Eje. La Cámara Criminal y Correccional de esta ciudad del noroeste, acompañada por ocho jurados populares, condenó ayer, por mayoría, a prisión perpetua a un hombre que mató a golpes con un palo a su propio padre en el marco de una discusión por la venta de la casa. Además, hirió de gravedad a su madre, quien sobrevivió de milagro, cuando quería salvar a su esposo del ataque.
El drama ocurrió en 2014 en la ciudad de La Falda.
Oscar Rubén Domínguez (58) fue encontrado culpable del delito de homicidio calificado por el vínculo y tentativa de homicidio calificado. Las víctimas fueron Alberto José Domínguez (87) y Ana María Amaro (78).
Por otra parte, los jueces ordenaron que se corra vista a una fiscalía de Instrucción para que se investigue por estafas a una inmobiliaria de la ciudad de La Falda y a un prestamista de La Cumbre.
Estos hombres habrían creado una situación de enorme presión sobre el hoy condenado y fueron duramente recriminados por la fiscal de Cámara
Haydeé Gersicich, quien solicitó la medida.
Historia de espanto
El drama ocurrió el 28 de octubre de 2014 en la vivienda familiar ubicada en calles Igualdad y Progreso, en el barrio Santa Rosa de la ciudad de La Falda.
Según la causa, el drama se desató cuando Oscar Domínguez intentó que sus padres accedieran a vender la casa, para pagar deudas de juego a una inmobiliaria y a un prestamista.
La negativa derivó en un brutal ataque en el que el anciano murió en el acto, mientras la mujer resultó con gravísimos golpes. Ella sobrevivió luego de una larga etapa de recuperación.
La Cámara estuvo integrada por Ángel Andreu, Ricardo Py y Omar Archilla en calidad de subrogante, secretaría de Alejandra Heredia.
Durante los alegatos, el cruce de la fiscal Gersicich y el defensor Juan Illía se centró en los resultados y apreciaciones sobre los peritajes psicológicos realizados al acusado por la perito Marcela Scarafía, titular del área de Medicina Forense.
Días atrás, la profesional había planteado la duda sobre el estado psíquico de Domínguez hijo al momento del homicidio, al tiempo que deslizó diversas consideraciones sobre un equivalente de emoción violenta.
La fiscal Gersicich desmenuzó el peritaje psicológico y rechazó de plano la emoción violenta excusable. Pidió perpetua, la pena que se dictaminó.
El asesor Illía, en cambio, se aferró a los atenuantes y aventuró un pedido de cuatro años de pena, con una esforzada y profesional dialéctica defensiva que no prosperó.
*Corresponsalía
Mirada al suelo. Durante gran parte del juicio, Oscar Domínguez (campera) se limitó a observar el piso. (Gentileza Semanario La Calle)