Excesos que ponen en riesgo la estabilidad sanitaria
En un mensaje emitido a 23:20 hora de este lunes 6 de Julio, Javier Dieminger amplió los detalles del noveno caso de Covid 19 en La Falda.
Pero no se animó a oficializar los detalles de algunas situaciones que ensombrecen no solo a un sector de la clase política, sino a algunas “ malas costumbres” sociales que en época de pandemia pueden convertirse en una pesadilla para toda una región.
Haz lo que yo digo, pero no lo que yo hago
Es paradójico que quien coordina el trabajo de inspectores municipales, que se supone deben velar por el respeto a las normativas sociales del distanciamiento, sea quien las viole con total despreocupación.
Esa parece la conclusión más precisa de lo protagonizado por el funcionario público Darío Almada, director de la Secretaría de Desarrollo Institucional faldense.
El pasado 27 de Junio realizó una fiesta de cumpleaños para su hijo de 20 años en su domicilio de Huerta Grande.
Situación sanitaria fuera de control
Las autoridades sanitarias faldenses, han sido un ejemplo de profesionalidad, anticipándose a la aplicación de medidas y disposiciones que permitieron afrontar las etapas más críticas de la cuarentena más estricta.
Pero toda esa ventaja, está esfumándose en un extremo relajamiento de un sector de la comunidad. Más allá de que damos por hecho que Almada dejará su cargo, el área de salud enfrenta un reto nuevamente impensado: realizando este lunes más de 60 hisopados.
No es el número el que asusta, sino la incertidumbre de no poder detectar el nexo epidemiológico. Por lo que sea cual sea la religión que profese, acompañemonos rezando para los resultados de los hisopados sean negativos.