Jornada de cierre del centro de día Maria Montessori
Compartimos en el predio en construcción de la Fundación María Montessori, momentos maravillosos que vivimos en la jornada de cierre de las actividades del 2021.
Un año especial del Centro de Día que ha sumado al desafío de evolucionar en sus proyectos técnicos profesionales, el de crecer en cantidad de jóvenes y continuar expandiendo las prestaciones en el predio de Villa Caprichosa La Falda.
Una jornada de pileta, hamburguesada y una merienda con la visita de Papá Noel ecológico (viaja en moto), acompañó las propuestas para el grupo completo de los que asistieron en el 2021.La convivencia estuvo cargada de intercambios de deseos.
La frutilla del postre fue la mágica llegada de Papa Noel, que repartió regalos personalizados y se sacó selfies y fotos con todos.
Un balance positivo de parte de la Fundación ,que pudo sobrellevar y superar muchos de los obstáculos que la pandemia colocó en el camino. Otro año de integración con la comunidad educativa de la región, expuesta en la presencialidad y participación virtual y el compromiso en la preparación de la ornamentación para el día 3 de diciembre.
Mucho impulso para un grupo humano que nació hace 14 años desde la necesidad de suplir una carencia institucional para familiares de personas con discapacidad.
Hoy la impronta inicial, acompaña ahora a un equipo de profesionales dedicados, se centra en la búsqueda de desarrollar y aplicar metodologías que cambian los paradigmas y limitaciones de las terapias convencionales.
Con el mismo espíritu de la médica-educadora italiana, pionera María Montessori y aplicando herramientas y criterios del siglo 21, la Fundación ha logrado un productivo intercambio con instituciones de la provincia y el país.
Este proceso dio curso a ayuda sostenimiento de un criterio continuo y más allá de la cobertura de las obras sociales a los jóvenes, la institución con personería jurídica fue a lo largo de su historia proyectando el crecimiento recibiendo contribuciones del gobierno municipal de La Falda, que donó los terrenos para el nuevo emplazamiento.
Así como ONGs como Rotary Club La Falda, la fundación Rotaria y el Rotary Club de Holanda. Que contribuyeron en la cesión en comodato de las maquinarias para el taller de aprendizaje de panadería.
Para los próximos años, la energía y recursos se orientan a unificar todas las actividades en el nuevo predio, y el desafío de sumar infraestructura edilicia, aulas, espacios para proyectos productivos autosustentables, y la posibilidad de anexar unidades funcionales para aquellas personas con discapacidad cuya familia tengan dificultades para responder a sus necesidades.
Será importante para seguir con la concreción de sueños, a que se sumarán empresas con un sistema de devengación impositiva para concretar los proyectos, ya que es esto factible desde la legislación y estatutos fiscales e institucionales
Compartimos un compacto de 30 minutos de la jornada que expone claramente los avances institucionales, el trabajo interdisciplinario del equipo técnico y el desarrollo de habilidades del grupo de jóvenes concurrente.